El pasado mes de julio fue un momento digno de olvidar para los directivos, responsables y trabajadores varios de VanMoof. La empresa holandesa de bicicletas eléctricas declaraba su bancarrota tras unos días con cientos de rumores a su alrededor. Después de aquello, muchos han sido los comentarios sobre el posible futuro de la compañía, sin embargo, nuevos movimientos apuntan a que este es su final.
El último episodio de esta serie sobre llega cuando la compañía le envía a sus usuarios un correo electrónico avisándolos de que deben ir a recoger las bicicletas eléctricas en proceso reparación que continúan en las instalaciones de sus servicios oficiales. Dicho aviso ya tenía cierto sabor a un ‘ahora o nunca’ . Muchos de estos clientes holandeses se acercaron rápidamente hasta sus dependencias más cercanas, donde en la puerta reposaba un cartel de “ESTAMOS CERRADOS”, (con mayúsculas).
Ante el incesante río de llamadas y correos electrónicos sin respuesta, los usuarios, que no podían recoger sus vehículos eléctricos, se dispusieron a demandar a la compañía por robo. Esto ha ocasionado que la propia policía holandesa haya tenido que emitir un comunicado para pedir a los afectados que dejen de hacerlo. Apenas unos días después de estos acontecimientos, la compañía anunció que la recogida de las bicicletas eléctricas en reparación podría realizarse entre el 16 y el 18 de agosto de 2023.
Sin embargo, aunque muchos ya han podido recuperar su bicicleta eléctrica, lo cierto es que la práctica totalidad de ellos han recibido el vehículo tal y como lo dejaron en el servicio técnico ya que la empresa no ha reparado casi ninguna de ellas. Esta situaciuón ha provocado aún más descontento por parte de clientes, quienes se verán abocados a enviarlas a una tercera empresa que pueda realizar dicha reparación sin poder hacer uso de la garantía oficial.
Y es que, según afirman personas cercanas a la firma holandesa, parte de culpa de su bancarrota la tuvo la gran cantidad de vehículos a reparar, algo a lo que la empresa no pudo hacer frente debido a los enormes costes de rehabilitación, desencadenando así su ya anunciada caída.
Aunque de momento esta historia se limita a los usuarios holandeses de VanMoof, clientes de otros territorios como Estados Unidos también han afirmado que en los últimos días están viendo serias dificultades para contactar con el servicio técnico de la empresa, ya sea para reparar sus vehículos como para recoger las propias bicicletas eléctricas en reparación.
Las diferentes delegaciones de VanMoof van cayendo poco a poco. La primera en caer fue la holandesa, mientras que la tienda de Londres recibió un reciente embargo por parte de la empresa propietaria del local. VanMoof Alemania, por su parte, se declaró en bancarrota oficialmente el pasado día 16 de agosto. Como se puede ver, los diferentes puntos oficiales de la compañía se van hundiendo poco a poco, lo que hace que muchos ya no tengan confianza en que la firma pueda llegar a revivir de nuevo en los próximos meses.
Redactor en Híbridos y Eléctricos desde 2021, cubriendo la actualidad del sector de los vehículos eléctricos y la movilidad sostenible. Fotógrafo profesional con experiencia en cualquier vertiente de la producción audiovisual. Técnico en Audiovisuales y Máster en Periodismo y Comunicación Digital por la Universidad Autónoma de Barcelona.
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