Mazda ya sabe cómo convertir al Mazda MX-5 en un coche eléctrico: estas son las pruebas
La industria automotriz se encuentra en medio de una transformación hacia la electrificación, un cambio que impactará incluso a los deportivos más icónicos, como el Mazda MX-5. A pesar de que Mazda ha afirmado que no lanzará un modelo eléctrico en la próxima generación de este roadster, existen indicios que sugieren que la compañía, con sede en Hiroshima, está evaluando un futuro eléctrico no solo para este modelo, sino también para otros automóviles deportivos de su línea.
La información se basa en una patente registrada en octubre de 2023 ante la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos, titulada “Automóvil Eléctrico”. Este documento fue recientemente divulgado por el portal estadounidense Carscoops. El diseño del vehículo eléctrico descrito en la patente presenta notables similitudes con el Mazda MX-5.
Con el cierre de 2023, Mazda mostró un prototipo denominado Mazda Iconic SP, que incluye un sistema eléctrico impulsado por dos motores rotativos característicos de la marca, los cuales funcionan como extensores de batería. Aunque esta tecnología podría ser una solución temporal para los vehículos que no sean completamente eléctricos de Mazda, el director de diseño de la compañía ha indicado que el Mazda Iconic SP podría estar destinado a un futuro MX-5 o a un RX-7.
Independientemente del nombre que finalmente adopte, las pruebas que respaldan que Mazda está desarrollando un coche eléctrico basado en el Mazda MX-5 o en un deportivo equivalente son evidentes en la patente mencionada. Este documento revela la preocupación de la marca por mantener la experiencia de conducción y el equilibrio de pesos en el futuro modelo eléctrico.
Para conservar la agilidad que distingue al MX-5, Mazda planea, según lo detallado en la patente, un deportivo con un motor eléctrico ubicado en el túnel de transmisión, donde también se instalarían varias pequeñas baterías. La patente indica que “al situar la batería en la sección del túnel, el centro de gravedad del vehículo se coloca cerca del centro, lo que reduce aún más el momento de inercia al tomar curvas”.
Siguiendo la tradición deportiva, el motor del vehículo eléctrico estará conectado a un diferencial que distribuirá la potencia al tren trasero, buscando un reparto óptimo de pesos. En este contexto, se contempla la colocación de baterías adicionales detrás de los asientos traseros e incluso debajo del asiento del pasajero, con el objetivo de equilibrar el peso del conductor.
Como ha señalado Mazda en múltiples ocasiones, el principal desafío de un Mazda MX-5 eléctrico es el peso. Por lo tanto, las soluciones técnicas descritas en esta patente se centran en el desarrollo de baterías más ligeras, cuya disponibilidad se anticipa en los próximos años.
Editado con FGJ CONTENT REWRITER
Editado con FGJ CONTENT REWRITER
Editado con FGJ CONTENT REWRITER