En Miami no llovieron sólo gotas, llovieron caos, oportunidades y hasta sanciones. La carrera sprint del Gran Premi de Miami se convirtió en un despropósito maravilloso, una de esas joyas inesperadas que la Fórmula 1 ofrece de tanto en tanto. Entre estrategias imposibles, paradas kamikaze y una pista que pasaba de acuática a casi seca en minutos, Lando Norris emergió como el gran triunfador. El británico supo esperar su momento, se la jugó en el instante justo alargando su parada y, con una pizca de fortuna y otra de audacia, se llevó una victoria que puede marcar un punto de inflexió en su temporada. Le acompañaron en el podio un brillante Oscar Piastri —que lideró gran parte de la carrera— y un Lewis Hamilton resucitado por una estrategia atrevida y eficaz de Ferrari. Todo ello, eso sí, bajo un cierre caótico con Safety Car, sanciones y coches contra el muro.
En medio del diluvio táctico y la locura estratégica, la historia volvió a cebarse con Fernando Alonso. El asturiano estaba a punto de firmar sus primeros puntos del año en una carrera que había sabido leer a la perfección… hasta que Liam Lawson le arruinó la fiesta con un toque por detrás que lo mandó al muro sin remedio. Carlos Sainz, por su parte, intentó la heroica desde la salida con neumáticos extremos y acabó abandonando tras un trompo y doble pinchazo al pasarse a los de seco. Una carrera para el recuerdo… y para el olvido, según el color de tu bandera. ¿Quién dijo que una sprint no podía ser una locura histórica?
Había dudas para la estrategia. Había dejado de llover, y aunque la pista estaba más para neumáticos extremos que para intermedios, casi no llovía ya en Miami. Todos escogieron intermedios menos Sainz, que trató de hacer la épica y salir con extremos, consciente de que en las primeras vueltas tendría mucha ventaja y rezando para que lloviera más, porque la pista se iba a ir secando poco a poco.
La vuelta de formación la dieron detrás del Safety Car y se veía claro que con intermedios todos iban a sufrir. Los monoplazas levantaban muchísimo spray y había muy poca visibilidad. Incluso los mejores pilotos fallaron, como Max Verstappen, que se fue largo en esa vuelta de formación. Por suerte para todos, y por mala suerte para Sainz, aunuqe finalmente se sacó bandera roja y la salida de retrasó. Las radios de los pilotos empezaron a echar fuego y todos decían que la visibilidad era nula. “La visibilidad es la peor que he tenido nunca en un monoplaza”, exclamó incluso Piastri.
Tras un parón de varios minutos, y con la pista mucho más seca, la carrera se volvió a poner en marcha. Ahora sí, todos con intermedios e incluso con la posibilidad de que la pista acabara muy seca. De las 19 vueltas de la Sprint, solo se correrían 16, pues se dieron dos vueltas más detrás del Safety Car. La FIA, siguió siendo muy precavida, como ya es habitual en las carreras de mojado en los últimos años.
La salida no fue limpia del todo. Piastri, como un campeón, no perdonó y tras salir mejor en los primeros metros, estranguló un poco a Antonelli en la primera curva, el italiano se iba largo, tras un pequeño toque, y caía a la cuarta posición, por detrás de Verstappen. Por su parte, Alonso ganó una posición y se metió en la zona de puntos de la sprint, en el 8º puesto. Sainz, ganó una posición y pasó a 13º, y los grandes ganadores fueron Lawson y Lance Stroll, que ganaron 5 posiciones cada uno.
Quedaban 13 vueltas y empezaban los primeros mensajes sobre el estado de la pista. “Se está secando muy rápido”, decía el líder del mundial. La carrera se empezó a estancar, aún había un poco de spray y los monoplazas dejaban un margen con el piloto de delante, había pocas batallas, pues era muy difícil seguir a los rivales en esas condiciones.
Todos buscaban las zonas más mojadas en la recta, para refrigerar esos neumáticos. Y las dudas empezaron a surgir. ¿Acabaría la carrera en condiciones de secos?. La sprint se puso de cara para los McLaren, que ya estaban saboreando otro 1-2, y Verstappen parecía conformarse con ese último escalón del podio de la carrera corta.
Los problemas que lleva arrastrando en las últimas carreras siguieron para Lewis Hamilton, que era incapaz de estar a 1 o 2 segundos de George Russell y estaba relantizando tanto a Alexander Albon como a Alonso, que estaban encima del piloto de Ferrari. El que también rodaba muy lento a falta de 9 vueltas era Antonelli, que tenía Russell a medio segundo, pero adelantar era muy complicado.
Quedaban 8 vueltas y la FIA dio permiso a los pilotos para activar el DRS. Hamilton y Antonelli podían sder las primeras vueltas. Nadie de los de delante quería arriesgar a cambiar a slicks, y fue Yuki Tsunoda, que salía último, quién quiso probar suerte y el milagro y paró en boxes a por neumáticos medios. En ese momento, los ingenieros de todos los equipos epezaron a monitorizar los tiempos de Yuki.
Y con tan solo ver un récor de un sector de Tsunoda, empezó a haber más acción en boxes. Hamilton y Sainz entraron en boxes a por neumáticos de seco. Lewis cayó a la 15ª posición y Carlos a la 18ª, pero trompeaba y pinchaba las dos ruedas traseras y se vio obligado a abandonar. Los neumáticos de seco eran claramente mucho más rápidos que los intermedios y Verstappen también paró en boxes. Incluso hubo un pequeño accidente, que la FOM no mostró y el neerlandés pasó por encima de alguna pieza de un monoplaza.
A falta de 5 vueltas Norris atacaba a Piastri, pero no querían perder tiempo, pues aún no habían entrado. Y a falta de cuatro vueltas, tanto Piastri, como Alonso y el resto pararon, solo Norris se quedó en pista con los intermedios. Hamilton fue el gran ganador de estos movimientos y se puso tercero, por delante de Verstappen.
A 4 vueltas del final, Alonso, que ya había parado a por neumáticos medios, sin poder hacer nada, vio como Lawson por fuera pista le tocaba por detrás y le arruinaba la sprint, pues acabó contra el muro, fuera de combate. En ese momento, salió el Safety Car, y todo apuntaba a que la carrera sprint podría acabar en esas condiciones.
Si aún no había lío suficiente, le pusieron 10 segundos de sanción a Verstappen, por el incidente en su parada en boxes, ya que al salir, chocó con Antonelli, que estaba parando en boxes, lo que hizo que el italiano no pudiera parar y tuvo que hacer otra parada, quedando relegado a la 11ª posición.
Norris fue el gran ganador de todo este lío y del Safety Car, ya que paró en boxes y ganó mucho tiempo saliendo primero, por delante de Piastri y Hamilton, que daba las gracias a Ferrari por la gran estrategia. Se la jugaron de los primeros y les salió muy bien. La Sprint finalizó con el Safety Car, un final descafeinado para tal carrera, y Lando Norris lograba una victoria, con un poco de suerte, que le puede venir bien de ahora en adelante para reforzarse mentalmente después de las últimas carreras donde Oscar Piastri, segundo hoy, le tenía comida la tostada. Hamilton completó el podio, seguido por Albon, Russell, Stroll, Lawson y Bearman, que cerraba la zona de puntos de la sprint.
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Pol Hermoso
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