Título: 7.000.000 € invertidos en una bicicleta eléctrica futurista para esto: un fracaso que se vendía en España
Contenido:
La Reevo fue presentada como una de las bicicletas eléctricas más innovadoras del mercado, diseñada para satisfacer las necesidades de quienes buscan un medio de transporte urbano eficiente y con una estética vanguardista. Su característica más distintiva era la ausencia de ruedas tradicionales; en su lugar, optaba por un buje central y radios, lo que le confería una apariencia impactante.
Desde un punto de vista técnico, la Reevo se diferenciaba por su sistema de transmisión revolucionario. En lugar de cadenas o correas convencionales, incorporaba un motor eléctrico situado en el buje del pedalier, que transfería la potencia a través de un sistema de engranajes y rodamientos internos, garantizando un funcionamiento suave y eficiente. La batería, con una capacidad de 504 Wh, prometía hasta 60 km de asistencia, y su integración en el único tubo del cuadro contribuía a su imagen minimalista.
Desarrollada por la empresa homónima desde 2020, la Reevo se promocionó como una bicicleta revolucionaria. Además de su innovador sistema de propulsión, contaba con características tecnológicas como el bloqueo por huella dactilar y un sistema de iluminación con sensores, que la diferenciaban de otros modelos disponibles en el mercado. A través de una campaña de crowdfunding, la empresa logró recaudar 7 millones de euros con el apoyo de más de 2.700 patrocinadores.
Sin embargo, lo que inicialmente se vislumbraba como una solución para los entusiastas de las bicicletas eléctricas se convirtió rápidamente en un fiasco. A pesar de las promesas, la producción de la Reevo no cumplió con las expectativas. La compañía solo logró entregar unos pocos cientos de unidades antes de desaparecer sin ofrecer explicaciones claras a los afectados. Muchos de los que confiaron en el proyecto nunca recibieron su bicicleta, y aquellos que sí la obtuvieron enfrentaron numerosos problemas técnicos.
Entre los principales inconvenientes se encontraba el sistema de frenado. Al carecer de bujes, la Reevo no pudo incorporar frenos de disco, optando por frenos de pinza de baja calidad, lo que comprometió su capacidad de frenado y representó un grave riesgo para la seguridad de los ciclistas. Con un peso de 30 kg, detener la bicicleta se tornaba una tarea complicada y peligrosa.
Los problemas no terminaban ahí. Los primeros usuarios reportaron fallos severos, como un ruido excesivo en el motor y las ruedas, una alta resistencia al pedaleo y una activación involuntaria del sistema de asistencia eléctrica, lo que podía provocar que la bicicleta se moviera sin control. Estos defectos, sumados a la falta de soporte técnico y de repuestos, dejaron a los propietarios de la Reevo en una situación desesperada.
El canal de YouTube Berm Peak realizó una prueba que puso de manifiesto estos problemas, corroborando las quejas de los usuarios. A pesar de que la Reevo contaba con algunas características interesantes, estas no compensaban los múltiples errores de diseño y la falta de control de calidad.
La Reevo se ha convertido en un claro ejemplo de cómo un proyecto financiado colectivamente puede fracasar de manera estrepitosa. Aunque su diseño futurista y sus características generaron grandes expectativas, la mala planificación, los fallos técnicos y el abandono del proyecto por parte de la empresa dejaron a los usuarios con un producto defectuoso y sin soporte.
Inicialmente concebida para el mercado estadounidense, la Reevo tuvo que adaptarse a la normativa europea para ser clasificada como una bicicleta de pedaleo asistido. En su versión europea, se eliminó el acelerador y se redujo la potencia de su motor eléctrico a 250 W, cumpliendo así con los requisitos legales del continente. Esto le permite asistir el pedaleo hasta una velocidad máxima de 25 km/h, ideal para desplazamientos urbanos.
En lo que respecta a su precio, la Reevo Editado con FGJ CONTENT REWRITER
