La Dirección General de Tráfico (DGT) está en el centro de la polémica estas Navidades por la implantación obligatoria de las balizas V16 a partir del 1 de enero, que sustituirán a los triángulos de emergencia. Esta medida ha generado confusión y críticas, como las de Facua, que las ha calificado como fraude masivo, o las de la Guardia Civil. El director de la DGT, Pere Navarro, ha dado varias explicaciones, subrayando que los agentes no tienen el objetivo de multar a quien no la lleve.
El precio, que supera los 60 euros, también ha sido objeto de críticas. Pese a ello, la DGT mantiene sus planes, recogidos en el Real Decreto 159/2021, que también establece la llegada de la baliza V27 a partir de la misma fecha. La baliza V27 es una tecnología complementaria a las V16.
Mientras estas son un dispositivo físico que debe activarse manualmente, la V27 es una señal virtual, denominada por la DGT “triángulo virtual”. A diferencia de las V16, que son obligatorias y de pago, la V27 será gratuita y voluntaria. Su funcionamiento se basa en la conectividad con la plataforma DGT 3.0 y en la geolocalización de las balizas V16 activadas.
El Real Decreto especifica que esta señal “se activará en el sistema de a bordo del vehículo para advertir la presencia de un peligro próximo, cuando este hecho haya sido informado por un tercero a la plataforma de vehículo conectado de la Dirección General de Tráfico”. Se trata de un símbolo de atención que aparecerá de forma automática en la pantalla de los vehículos conectados que circulen cerca de una incidencia reportada con una V16. La DGT no ha facilitado detalles concretos sobre su instalación, pero deberá integrarse en el equipamiento de los vehículos para conectarse al Punto de Acceso Nacional de Información de Tráfico y Movilidad.
El decreto reitera su carácter voluntario: “esta señal, de carácter voluntario, solo se visualizará en aquellos vehículos que estén conectados por medios telemáticos, de forma directa o a través de un proveedor de servicios”. **REDACCIÓN FV MEDIOS**

