Siempre ha habido jefes de equipo en la Fórmula 1 que no se caían bien. Basta pensar en Enzo Ferrari y Colin Chapman, el tradicionalista por un lado y el valiente innovador por otro. Ferrari consideraba a Chapman un “mago” que construía coches arriesgados y poco fiables, mientras que Chapman consideraba a Ferrari terco y retrógrado.
O, no hace tanto, Ron Dennis y Flavio Briatore, el perfeccionista a veces estrecho de miras por un lado y el playboy con métodos empresariales poco convencionales por el otro.
Toto Wolff, jefe de equipo de Mercedes, y Helmut Marko, asesor de de Red Bull, también mantuvieron durante años una relación personal bastante reservada. Cuenta la leyenda que, en el punto más bajo de su relación, uno de ellos llegó a intercambiarse los asientos cuando les amenazaron con sentarse uno al lado del otro en primera clase en un vuelo de larga distancia.
Pero en el caso de los dos austriacos, eso es agua pasada. Tras la última carrera de la temporada 2024 en Abu Dabi, se sentaron en una mesa con Ernst Hausleitner y Alexander Wurz, de la ORF, y charlaron distendidamente sobre el año que acababa de terminar. Un escenario que hasta hace poco era difícilmente inimaginable.
“Cuando hay rivalidad y se intenta ganar con todas las armas, es difícil acercarse”, intenta explicar Toto Wolff al hablar de su complicada relación. Pero al final, volvieron a estar juntos porque “en términos de actitud, sólo somos un pequeño grupo de austriacos en la Fórmula 1. Con respeto mutuo”.
Sin embargo, no siempre fue así, especialmente entre Wolff y Marko. Ha habido muchos puntos de ruptura en los últimos 15 años. Por un lado, la famosa frase de Wolff de que Red Bull era “sólo un fabricante de bebidas gaseosas”, que se dice que Dietrich Mateschitz nunca le perdonó del todo.
Por otro lado, Marko siempre se llevó muy bien con Niki Lauda, que fue “sparring” de Toto Wolff en Mercedes hasta su muerte. En julio de 2015, sin embargo, se produjo un grave malentendido entre Red Bull y Lauda cuando Red Bull buscaba un nuevo socio motorista tras separarse de Renault y había puesto sus ojos en Mercedes.
Durante una reunión entre Lauda y Mateschitz, supuestamente hubo un apretón de manos, que fue percibido por Red Bull como el sellado de un acuerdo para 2016, mientras que Lauda sólo quería despedirse de la reunión con el apretón de manos. Al menos eso es lo que Bernie Ecclestone dijo.
En cualquier caso, la alianza entre Red Bull y Mercedes no se materializó y unos años después, en 2021, la relación volvió a recrudecerse cuando Max Verstappen y Lewis Hamilton se disputaron el título mundial. La temporada y, sobre todo, el polémica final en Abu Dabi, dejaron heridas abiertas.
Toto Wolff, Team Principal and CEO, Mercedes-AMG F1 Team
Foto de: Sam Bagnall / Motorsport Images
2021, dice Marko, fue “la temporada más dura que hemos vivido, tanto en lo deportivo como en lo psicológico y en todos los ámbitos periféricos”. “Con un final del que estamos satisfechos y Mercedes, por supuesto, de ninguna manera. Y eso también desencadena emociones. Somos unos apasionados de este deporte y eso ha removido muchas cosas”.
Wolff asiente y confirma: “Luego vino 2021, donde fue realmente duro a veces, donde por supuesto tienes tu percepción y tu perspectiva, y no la del otro. Y entonces fue realmente difícil. […] Siempre hubo respeto, pero a veces nos quitábamos los guantes y luchábamos con los puños desnudos”.
“Pero ya somos mayorcitos”, asiente Marko, señalando que “hemos aprendido a vivir y a lidiar con las derrotas. Eso nos vuelve a unir como personas”. Wolff devuelve las amables palabras al afirmar: “Siento un enorme respeto por lo que Helmut ha logrado en su carrera, como piloto, pero también como líder de facto del equipo Red Bull.”
Una afirmación que también podría interpretarse como una leve puñalada a Christian Horner, quien presumiblemente se ve a sí mismo como el líder más importante del equipo Red Bull en su papel de director del equipo. El hecho de que Wolff le niegue indirectamente esta posición demuestra que la relación Wolff-Horner es menos relajada que la relación Wolff-Marko.
El hecho de que Wolff y Marko hayan vuelto a encontrar un terreno común tiene mucho que ver con la polémica que rodeó a Horner hace aproximadamente un año, cuando fue acusado de acoso sexual por una empleada de Red Bull. Las implicaciones de las acusaciones fueron noticia durante meses.
Y causaron desavenencias internas en Red Bull. Aunque Horner y Marko siempre parecieron armoniosos de cara al exterior, se dice que gran parte de la confianza que una vez existió entre bastidores se perdió en el transcurso del asunto. Desde fuera, parece como si Wolff y Marko se hubieran acercado porque entretanto tenían enemigos comunes e intereses comunes.
Wolff no lo confirma directamente, pero reconoce que “sin duda, la muerte de Dietrich Mateschitz nos ha unido de alguna manera. Aunque hubiera rivalidad, ¡era un empresario increíble! Los austriacos se mantienen unidos y quizá eso no ocurría en el equipo [Red Bull]”.
Cuando la situación interna de Red Bull amenazó con escalar por completo, Wolff incluso le hizo a Marko la oferta irónica de que podría irse a Mercedes como el “nuevo Niki”, preferiblemente con Verstappen como piloto. Sin embargo, tanto Marko como Verstappen rechazaron la oferta, al menos por ahora.
En una entrevista con oe24, en mayo de 2024, cuando la polémica de Horner aún no estaba tan resuelta como ahora, Marko dijo: “Ya no hay las tensiones que teníamos en años anteriores. He oído decir que ahora somos hermanos de sangre. Pero eso es claramente una exageración”.
“Mientras tanto, nos hemos acercado mucho más”, dijo Toto Wolff. “A pesar de la rivalidad, hay valores comunes que defendemos. Con todas las cosas que han pasado en los últimos meses, nos hemos dado cuenta de que pensamos igual”. Y esto, añade, “por el comportamiento de algunas personas”.
Desde esta perspectiva, probablemente sea un gran “mérito” de Horner que Wolff y Marko, los dos directivos austriacos más poderosos de la F1, hayan vuelto a encontrar una longitud de onda común. Queda por ver si esto durará.
Una cosa es segura: los dos equipos seguirán siendo rivales y vecinos en el pitlane en 2025, ya que Red Bull acabó tercero y Mercedes cuarto en el último campeonato de constructores.
En este artículo
Christian Nimmervoll
Fórmula 1
Mercedes
Red Bull Racing
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