La marca de coches Ebro SUV ha iniciado la fabricación de sus primeros vehículos en Barcelona, generando interés en la confiabilidad y disponibilidad de sus piezas por parte de los consumidores. Para abordar estas preocupaciones, Ebro ha establecido una asociación logística de posventa con Kuehne + Nagel, con un acuerdo vigente por tres años en España.
Esta alianza garantizará a los clientes de Ebro en España un suministro oportuno de piezas y repuestos cuando sea necesario, al facilitar un almacenamiento centralizado en Azuqueca de Henares, Guadalajara, donde Kuehne + Nagel operará para cubrir eficientemente todo el territorio. Según informes de la empresa, este acuerdo mejorará la cadena de suministro posventa y elevará la satisfacción del cliente final.
El presidente de Ebro, Pedro Calef, resaltó que esta colaboración permitirá una distribución posventa rápida, efectiva y respetuosa con el medio ambiente, aspectos cruciales para una nueva marca en el mercado. Ebro lanzó su primer modelo, el Ebro S700, el pasado 20 de noviembre, un SUV compacto con versiones híbridas y de gasolina, posicionándose en un competitivo segmento del mercado automotriz.
La producción de Ebro se llevará a cabo en la antigua planta de Nissan en la Zona Franca de Barcelona, con planes de ensamblar 800 unidades del Ebro S700 antes de que finalice el año. Además, la marca tiene previsto expandir su oferta con modelos como el Ebro S800 y el Ebro S400, adaptándose a las demandas del mercado.