El complicado regreso de Michael Schumacher a la Fórmula 1 con Mercedes

El complicado regreso de Michael Schumacher a la Fórmula 1 con Mercedes

Se dice que las segundas partes nunca fueron buenas, y aunque hay casos que rompen la norma, lo habitual es que sea así. Pese a ello, Michael Schumacher decidió volver a la Fórmula 1 en 2010, cuatro años después de su última carrera con Ferrari.

El piloto alemán, que había abandonado la máxima categoría al término de la temporada 2006, anunció el 23 de diciembre de 2009 su regreso a los circuitos, enrolado en el recién creado equipo Mercedes.

La noticia tuvo un gran impacto tanto dentro como fuera del paddock: Schumacher, siete veces campeón del mundo, retornaba a la Fórmula 1 con una marca histórica como Mercedes, formando una dupla alemana que se completaría con Nico Rosberg, encargado de pilotar el otro monoplaza del equipo plateado.

Además, Mercedes llegaba para ocupar la plaza de Brawn GP, el equipo de Ross Brawn que había logrado arrasar en su primer y único año de historia, ganando los títulos de pilotos y constructores.

Sin embargo, la apuesta no dio los frutos esperados. Ni Rosberg ni Schumacher alcanzaron los resultados previstos, aunque la escudería concluyó cuarta en la tabla de constructores. La decepción fue mayor del lado del Káiser, que vio cómo su compañero de equipo lo superaba ampliamente en puntos. Schumacher cerró la temporada con tres cuartas plazas como mejor resultado, y tuvo que conformarse con la novena posición en el campeonato.

En las sucesivas campañas tampoco le fue mucho mejor, con resultados similares y siempre a rebufo de Rosberg. Pero el regreso de ‘Schumi’ a los circuitos no fue en vano. En 2012 logró redimirse parcialmente, consiguiendo la pole position en el Gran Premio de Mónaco y un tercer puesto —único podio de su segunda etapa en la F1— en el Gran Premio de Europa, aunque este último logro quedó eclipsado por la actuación de un inspirado Fernando Alonso.

Aunque fue el año en el que consiguió alcanzar las plazas de honor, cerró 2012 con solo 49 puntos y relegado a la 13ª posición del mundial, siendo su peor campaña con Mercedes.

Fue entonces cuando Mercedes se decidió a fichar a Lewis Hamilton, y Michael Schumacher optó por retirarse, esta vez de forma definitiva. El caprichoso destino quiso que la leyenda alemana, apenas un año después de poner fin a su carrera deportiva, sufriese un grave accidente mientras esquiaba. Llegó a temerse por su vida, pero logró sobrevivir, pese a las duras secuelas. A partir de ese momento, su estado de salud ha estado envuelto en un gran secretismo.

Tras 2013, y aprovechando su ventaja en la era turbo híbrida, Mercedes encadenó ocho títulos de constructores y siete de pilotos, reconociendo en todo momento la importancia que Schumacher había tenido en sentar las bases del equipo ganador.

**REDACCIÓN FV MEDIOS**