El Mercedes Clase G es el rey del todoterreno, con permiso de los Land Cruiser, Range Rover y compañía. Un modelo que, además, se ha convertido en todo un icono y ha trascendido el 4×4. Sus verdaderos clientes frecuentan más el casino de Mónaco, los bulevares de Beverly Hills y las tiendas más caras de Madrid que el campo. El nuevo Clase G tiene una importante novedad, una versión G 580 totalmente eléctrica que acaba de salir a la venta en España.
Como estarás imaginando, el Clase G eléctrico es cualquier cosa menos barato. De hecho, ninguna versión lo es. El Clase G más barato que puedes comprar es el diésel y cuesta casi 149.000 euros. En el otro extremo de la gama encontramos el Mercedes-AMG G 63, que cuesta la friolera de 219.300 euros.
No es tan caro como el AMG, pero no se queda muy atrás: el Mercedes G 580 eléctrico cuesta 196.221 euros en España. Un precio acorde a su estatus, tanto a nivel de imagen como de tecnología. Como podrás imaginar, no cumple los requisitos para recibir ayudas del Plan Moves III.
La parte buena para no complicarse demasiado es que, a diferencia del Clase G de combustión, este tiene pocas opciones de personalización y equipamiento extra. Entre el equipamiento extra se puede elegir el paquete de confort térmico, estribos en color negro, alfombrillas de goma, entretenimiento para las plazas traseras MBUX High-End, extintor y el sistema flexible de carga Pro. Ni siquiera se pueden elegir otras llantas diferentes a las de serie.
Está disponible en cinco colores, cuatro de ellos con pintura Manufaktur: negro, gris, azul y dos blancos diferentes. Todas ellas sin coste adicional.
A nivel técnico, el G 580 es una auténtica virguería. Lleva cuatro motores eléctricos, uno para cada rueda, cada uno con su propia transmisión. Cada motor ofrece 147 CV (108 kW) de potencia, con los que el G 580 tiene en total 587 CV (432 kW) de potencia y unos descomunales 1.164 Nm de par motor.
Además de hacer el 0-100 km/h en sólo 4,7 segundos, sus cuatro motores le permiten girar sobre sí mismo, una función con la que los fabricantes de neumáticos estarán encantados.
La batería del G 580 tiene 116 kWh de capacidad útil. El Clase G nunca fue precisamente un peso pluma y ahora, con esta enorme batería, menos aún. El G 580 declara un peso de 3.085 kilos en vacío. Entre su enorme masa y su complicada aerodinámica, podrás imaginar el enorme apetito de electrones que tiene este vehículo: homologa un consumo combinado de 28,9 kWh/100 km, con una autonomía de 455 kilómetros en uso combinado y hasta 639 kilómetros en ciudad, todas las cifras según la homologación WLTP.
Redactor y probador de Híbridos y Eléctricos, desde 2019 cubriendo la actualidad del sector de los vehículos eléctricos y la movilidad sostenible.
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