Abarth se ha transformado. Ahora es una marca de coches eléctricos y esa transición es, precisamente, la que ha supuesto la llegada del coche más potente de su historia, el Abarth 600e que, como ocurre habitualmente, es una versión con esteroides del 600e más racional, el de Fiat.
A simple vista queda clara la relación entre ambos modelos (mide 4.189 mm de largo y tiene una capacidad de maletero de 360 litros), pero también queda patente que éste es más deportivo. Se puede apreciar en la selección de colores para la carrocería (Acid Green, Antidote White, Shock Orange, Venom Black e Hypnotic Purple); en la parrilla y los paragolpes específicos, en el diseño exclusivo de las llantas de 20 pulgadas, en las pinzas de freno verdes y en la presencia del alerón.
Aunque el sistema de propulsión que utilizan es el mismo, cada una de las dos variantes del Abarth 600e tiene un rendimiento y prestaciones diferentes. En el Turismo el motor asociado al eje delantero desarrolla una potencia de 175 kW (240 CV) y es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,24 segundos. El Scorpionissima llega hasta los 207 kW (280 CV), completa el sprint en 5,85 segundos y tiene una velocidad máxima de 200 km/h. En ambos casos el par motor es idéntico, 345 Nm.
Ambas versiones también comparten la batería de 54 kWh de capacidad bruta (que también es la que emplea el Fiat 600e), homologan un consumo de 19 kWh/100 km en ciclo mixto y declaran una autonomía de 334 km.
Además, el Scorpionissima incorpora de serie estos packs que en el Turismo se pueden añadir por separado:
La lista de precios del Abarth 600e es la siguiente:
Ambas versiones están dentro de los parámetros del Plan Moves III, así que pueden acogerse a las ayudas de hasta 7.000 euros si se achatarra un coche con 7 o más años de antigüedad.
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El modelo más potente de la historia de Abarth es un SUV eléctrico con 280 CV
