China impone multas de hasta 243.750 euros y exige disculpas públicas por difamar a marcas como BYD y XPeng

China impone multas de hasta 243.750 euros y exige disculpas públicas por difamar a marcas como BYD y XPeng

La creación de contenido sobre automóviles es una práctica extendida globalmente. China, que se ha sumado a esta corriente, aplica las sanciones más severas cuando el contenido es falso o difamatorio. Las autoridades chinas se toman el rigor informativo muy en serio, como demuestran las múltiples resoluciones judiciales que han castigado a creadores de contenido por atacar a empresas importantes como XPeng, Great Wall Motors (GWM) o BYD.

Todos ellos han sido sancionados tras demostrarse que publicaron material falso.

La figura del influencer ha generado controversia mundial. Apoyados en contenidos virales y en pagos de las marcas, no siempre muestran la realidad de un producto. Si bien la mayoría de los creadores muestran el lado más favorable de una marca, también existen quienes generan contenidos contrarios a sus intereses, a menudo sin una base verificable.

Esto es precisamente lo que China busca evitar para proteger su pujante industria automovilística.

Según medios oficiales, varias cuentas en línea en China han sido denunciadas por publicar contenido insultante o difamatorio contra distintas marcas de automóviles en los últimos años. Los tribunales han determinado que estos creadores utilizaron imágenes falsas o alteradas de vehículos en llamas para afirmar, de manera engañosa, que los incendios fueron espontáneos. Dichas conductas han sido calificadas como una violación de los derechos de reputación de las marcas.

BYD, al ser el mayor fabricante del país, ha sido el objetivo más frecuente.

Una sentencia firme, por ejemplo, ordena la eliminación inmediata del contenido, la emisión de una disculpa pública y el pago de una indemnización de 2.018.700 yuanes (unos 243.750 euros). Este caso de BYD no es aislado. Las autoridades citan otro similar contra GWM, donde el tribunal dictaminó que el material excedía los límites de la supervisión pública legítima y dañaba la reputación.

La sentencia, también firme, exige la retirada de los vídeos, una disculpa pública y una compensación de 200.000 yuanes.

China se toma muy en serio cualquier crítica hacia una industria que considera vital para su éxito como potencia económica e industrial. Marcas como BYD han expandido su presencia global, demostrando la competitividad de la automoción china. Con el aumento de las exportaciones a mercados como el europeo, estas resoluciones judiciales buscan impedir que los creadores de contenido difamen a la industria mediante información falsa o manipulada.

**REDACCIÓN FV MEDIOS**