La solución más extraña que evita el robo de los cables de carga de los coches eléctricos es este curioso líquido indetectable
El auge de los coches eléctricos ha planteado nuevos desafíos en materia de seguridad, especialmente en la protección de los cables de carga. Los propietarios de estos vehículos enfrentan problemas que varían desde instalaciones inadecuadas hasta la frustrante experiencia de encontrar puntos de carga ocupados o fuera de servicio. Esta situación se ve agravada por el incremento en el número de robos de cables de carga, fenómeno impulsado por la alta demanda de cobre.
El aumento de estos delitos no solo afecta a los propietarios de vehículos eléctricos, sino que también ocasiona pérdidas económicas significativas para las empresas que gestionan las redes de recarga. Estas organizaciones deben lidiar con el descontento de los conductores y asumir los costos de reparación de las estaciones dañadas. Ante este escenario, InstaVolt, una de las principales redes de recarga en el Reino Unido, ha desarrollado una solución innovadora denominada CableGuard.
Este sistema, creado en colaboración con Formula Space, una empresa especializada en vehículos eléctricos, incorpora características novedosas. A simple vista, CableGuard se asemeja a un cable de carga convencional, pero ofrece una protección superior. Su funda está fabricada con un material resistente y flexible que previene la abrasión, protege el cable de impactos y actúa como un disuasivo, dificultando su corte o rotura.
Para los delincuentes que intenten sustraerlo, el cable oculta una sorpresa adicional: un sistema que libera un líquido forense en caso de manipulación o corte. Este líquido, indetectable a simple vista, deja una marca única que puede ser rastreada con luz ultravioleta y está vinculada a una ubicación específica mediante una base de datos accesible para la policía. De este modo, si se intenta comercializar el cable robado, se puede verificar su origen ilícito.
InstaVolt destaca que una de las ventajas de CableGuard es su aplicabilidad tanto a cables nuevos como a aquellos que ya están en funcionamiento, lo que facilita una actualización sencilla para mejorar la protección. Además, la compañía ha implementado un conjunto de medidas de seguridad avanzadas en toda su red de recarga, que incluyen un sistema de inteligencia artificial (IA) capaz de identificar en tiempo real actividades sospechosas cerca de sus estaciones.
Se ha establecido un sistema de GPS y geolocalización que alerta cuando un cable sale del perímetro de un punto de carga, permitiendo una respuesta rápida. Complementando estas medidas, la vigilancia se lleva a cabo las 24 horas del día y los 7 días de la semana, por equipos de seguridad que incluyen patrullas in situ. Según InstaVolt, «estos esfuerzos ya están dando resultados, con incidentes recientes que han llevado a arrestos y procesos judiciales gracias a la tecnología avanzada implementada».
Delvin Lane, director ejecutivo de InstaVolt, enfatizó: «La protección de la infraestructura es vital para nuestra misión de ofrecer una red de carga de vehículos eléctricos fiable y accesible. El robo de cables no solo afecta a nuestras operaciones, sino que también inconvenienta a los conductores. A través de la implementación de soluciones de vanguardia como CableGuard, junto con sistemas de vigilancia inteligentes, abordamos el problema de forma proactiva y reforzamos nuestro compromiso con la seguridad de los conductores y la disponibilidad del servicio».
Vern Pollard, director de Formula Space, añadió: «CableGuard es un producto innovador destinado a frenar las interrupciones derivadas de la creciente tendencia del robo de cables de carga de vehículos eléctricos. Hemos combinado un diseño inteligente con tecnología forense de eficacia probada para proteger la infraestructura vital de vehículos eléctricos en el Reino Unido. Nuestro objetivo es simple: hacer que el robo de cables de carga de vehículos eléctricos sea una estrategia perdedora».
Editado con Editado con FGJ CONTENT REWRITER