En una temporada tan igualada como la de 2025, cada detalle cuenta. Y en el Gran Premio de Bélgica, Oscar Piastri volvió a demostrar que es capaz de aprovechar cualquier oportunidad. Lando Norris tenía la pole, la tendencia positiva de las últimas citas y un McLaren F1 que ha demostrado ser el coche más fuerte del campeonato. Pero todo eso no fue suficiente.
“Oscar simplemente hizo un buen trabajo. No hay mucho más que decir”, reconoció Norris tras bajarse del coche. “Se comprometió más en Eau Rouge y tuvo rebufo. Nada que reprochar. Hizo mejor trabajo al principio y desde ahí no pude hacer nada”.
El británico perdió el liderato tras la mítica recta de Kemmel, cuando su compañero se tiró con todo en la curva 5. A partir de ahí, todo fue a contracorriente para Norris. Intentó reaccionar con una estrategia alternativa: calzó neumáticos duros en el paso a seco, mientras que Piastri apostó por los medios. Pero ni eso le funcionó.
“Pensé que el neumático duro sería mejor hasta el final. Me costó calentarlo, pero al principio tenía más agarre”, explicó. “El problema fue la parada: entré una vuelta más tarde y fui el segundo coche en boxes. Perdí como ocho o nueve segundos solo por eso. Y recuperar esa distancia fue todo un reto”.
De hecho, el propio Norris admitió que ni siquiera sabía que Piastri iba con medios. “Will (Joseph, su ingeniero) me preguntó si quería el duro y dije que sí. No fue tirar los dados, fue una decisión rápida. Pero no sabía qué llevaba Oscar”.
La persecución no fue limpia. Norris cometió varios errores tratando de cazar a su compañero, entre ellos uno importante en Pouhon, que le hizo perder segundos clave. “Si hubiera hecho una carrera perfecta, ¿podría haber ganado? Puede. Pero no lo hice. Y Oscar también cometió alguna pequeña cosa. Aun así, mereció la victoria”, admitió.
Foto de: Andy Hone / LAT Images via Getty Images
Pese a la derrota, Norris quiso quedarse con lo positivo: “Estoy feliz por el equipo. Otro doblete, creo que el primero en Spa en muchos años. Es un resultado merecido para todos”.
La lucha interna en McLaren promete ser el gran titular de la segunda mitad del campeonato. Piastri amplía su ventaja en el Mundial y ya le saca 16 puntos a Norris. Y aunque el británico viene de dos victorias consecutivas, Spa ha reactivado las dudas que le acompañaron en la primera parte del año: errores en momentos clave y cierta falta de determinación cuando Piastri aparece con el cuchillo entre los dientes.
Sobre su salida, Norris también quiso hacer autocrítica: “No tuve la mejor curva 1, pero Oscar me habría pasado igual. Venía con mejor ritmo y rebufo. No estoy demasiado decepcionado, pero tengo que revisar qué podría haber hecho mejor”.
Por suerte para él, la revancha llega pronto. La próxima semana, Hungría, un circuito que le trae buenos recuerdos: “Budapest es uno de los mejores para mí. Me gusta, se me da bien y es donde debuté en F1. Así que tengo ganas”.
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