ando Norris se mostró frustrado tras una serie de eventos desafortunados en el Gran Premio de São Paulo que lo dejaron en una P6. Su situación en la carrera dio un giro cuando, tras entrar a pits, una bandera roja permitió a otros pilotos cambiar neumáticos sin necesidad de parar, una ventaja que le permitió a Max Verstappen liderar y eventualmente ganar la carrera, ampliando su ventaja en el campeonato.
Norris comenzó en la pole, aunque perdió el liderato en el arranque ante George Russell. Ambos optaron por parar justo antes de que el Auto de Seguridad Virtual terminara, pero el golpe decisivo llegó en la vuelta 32, cuando un choque de Franco Colapinto con su Williams desencadenó una bandera roja. Esto permitió a pilotos como Esteban Ocon, Verstappen y Pierre Gasly –quienes no habían parado– cambiar neumáticos, dejándolos en una posición estratégica para la reanudación.
Tras la carrera, Norris reflexionó sobre lo sucedido: “Es solo mala suerte. A veces las cosas salen así, y no fue nuestra culpa. No me importa lo que digan; quedarse en pista no era la mejor opción. El accidente causó la bandera roja y, al final, fue suerte para otros y mala suerte para nosotros. No fue talento, fue solo suerte.”
Norris también experimentó otros desafíos durante la caótica carrera, perdiendo posiciones en un reinicio tras el Safety Car en la vuelta 43, aunque recuperó la P6 tras un intercambio de posiciones con su compañero Oscar Piastri. Sobre las condiciones y su desempeño, el piloto británico admitió: “Cometí un par de errores; no fue una carrera perfecta para mí”.
Aunque Verstappen ahora lidera el campeonato con 62 puntos de ventaja, Norris mantiene la calma de cara a las últimas carreras de la temporada: “Creo que, sin importar nada, cuarto era lo mejor que podíamos hacer. Seguiremos enfocados”.