Es uno de los patrones de la primera mitad de la temporada: mientras que el RB21 —el coche de Red Bull Racing este año— tiene una ventana de funcionamiento muy pequeña y resulta especialmente difícil de manejar, el monoplaza de Racing Bulls es mucho más fácil de usar para los pilotos. Esto se ha visto, entre otras cosas, en la fulgurante llegada de Isack Hadjar, pero también en las dificultades continuas con el segundo asiento de Red Bull.
Mientras que Yuki Tsunoda impresionó a principios de temporada en Racing Bulls, ahora sufre junto a Max Verstappen. En cambio, ocurre lo opuesto con Liam Lawson: el neozelandés tuvo que dejar Red Bull después de solo dos carreras, pero ha recuperado la confianza en el equipo hermano, llegando incluso a lograr un octavo puesto en Hungría, por delante de Verstappen.
Esto dice mucho sobre la diferencia de presión entre ambos equipos y sobre lo difícil que es ser compañero de Verstappen, pero también, sin duda, sobre las diferencias entre ambos coches. El monoplaza de Racing Bulls tiene una ventana de funcionamiento mucho más amplia y es más fácil de manejar. Los responsables del equipo reconocen que es algo en lo que trabajaron de forma intencionada.
“Trabajamos en ello el pasado invierno y después nos dimos cuenta de que teníamos un coche bastante agradable para los pilotos. Pero eso solo lo puedes evaluar cuando compites contra otros. Hasta los test de Baréin, en realidad no estábamos seguros”, explica el nuevo jefe de equipo, Alan Permane. “Pero después de esa semana teníamos bastante confianza, también porque rodamos toda la semana con mucha carga de combustible. Tras las primeras carreras nos dimos realmente cuenta de lo que habíamos hecho y a partir de ahí orientamos el desarrollo”.
Con estas palabras, Permane deja claro que Racing Bulls ha trabajado de forma muy consciente para dar a sus pilotos un coche del que puedan extraer el máximo rendimiento. Parece algo ligado al ADN del equipo, ya que la escudería de Faenza suele tener rookies en sus coches. Sin embargo, al preguntarle por ello a Motorsport.com, Permane señala que no es tanto por los novatos, sino por una preferencia general.
“No, para ser sincero, no creo que se deba a eso. Es más bien que lo descubrimos el pasado invierno después del trabajo que hicimos de un año a otro. Claro que tienes razón, por supuesto ayuda a los rookies. Pero creo que un piloto top también se sentiría cómodo en un coche así y podría sacarle el máximo rendimiento”.
Cuando Permane menciona a un “piloto top”, surge rápidamente la pregunta que muchos aficionados se han hecho de distintas formas: ¿por qué Red Bull no ha dejado aún que Max Verstappen pruebe el coche de Racing Bulls? Es lógico que no pueda hacerse durante un fin de semana de carrera, con todos los focos y compromisos de patrocinio, pero en teoría sí podría hacerse en un filming day. Cada equipo dispone de dos de estos días al año, en los que se pueden completar hasta 200 kilómetros con neumáticos especiales de demostración de Pirelli.
Sería interesante para ambas formaciones: daría a Racing Bulls una referencia clara del potencial del coche y pondría en perspectiva el rendimiento de Hadjar. Además, la retroalimentación técnica podría ser útil y daría a Verstappen —y, por tanto, a Red Bull Racing— una buena visión de las diferencias entre ambos coches.
Cuando en Hungría le preguntan a Verstappen si alguna vez ha sentido la tentación de probar el Racing Bulls, responde entre risas: “Bueno, mejor no hablemos de eso”. Según personas del paddock, una de las razones para no hacerlo es que podría ser un tema sensible para los rivales. Entre los equipos competidores hay un debate abierto sobre la relación entre los llamados equipos A y B. La FIA quiere delimitarlo con más claridad en el reglamento operativo (sección F) a partir de 2026, y que Verstappen probara el coche del equipo hermano —aunque en teoría sea posible— probablemente levantaría algunas cejas.
El jefe de McLaren, Andrea Stella, se pronunció en la rueda de prensa de Hungría sobre la relación entre equipos A y B, y sobre la necesidad de vigilarla estrictamente. “McLaren ya ha planteado en el pasado la cuestión de la independencia de los equipos. Es un tema importante de debate, para asegurar que un equipo que opera de forma completamente independiente esté protegido frente a ventajas que puedan tener otros equipos que dependen entre sí. En este momento, McLaren confía en las reglas y en la manera en que se aplican. Lo vemos como una buena forma de gestionar los riesgos de la conexión entre distintos equipos. Pero sin duda es un tema para conversaciones constructivas, para que en el futuro podamos tratar la cuestión de los equipos independientes de una manera quizá diferente a la actual”. En este contexto, quizá haya que evitar incluso la apariencia de conflicto, aunque en teoría Verstappen podría subirse a un Racing Bulls.
Además, ya sería tarde para aprender algo realmente útil de un día de pruebas. El jefe de Red Bull, Laurent Mekies, ya ha dicho que ambos coches son demasiado diferentes como para que lo que se aprenda pueda aplicarse directamente al RB21. Y lo dice con conocimiento de causa, incluso por su experiencia previa como ingeniero. Además, en las fábricas la atención ya está puesta en el reglamento de 2026, por lo que las actualizaciones de las últimas semanas llevaban tiempo en preparación y prácticamente no queda nada nuevo por diseñar para los monoplazas de este año. Incluso la información obtenida en un test no podría aplicarse en la práctica por las limitaciones del techo presupuestario y el tiempo de túnel de viento, al menos no en lo que respecta al desarrollo de los coches actuales.
En este artículo
Sé el primero en enterarte y suscríbete para recibir actualizaciones por email de noticias en tiempo real sobre estos temas.
Source link
Somos un medio informativo de vanguaria comunicate con nosotros al 8297159634
Contacto: FVDigital
FV DIGITAL 2024