No hay ninguna duda que los SUV dominan la actualidad del panorama automovilístico internacional. Los llamados todocaminos han conseguido no sólo desbancar a los segmentos tradicionales, también ha destruido algunos de las categorías más clásicas como la de los monovolúmenes. Muchos de ellos han sido reconvertidos y adaptados al formato crossover. El Tesla Model X es un claro ejemplo de cómo han cambiado las tendencias de mercado.
El periplo comercial de Tesla arrancó con un deportivo biplaza y, posteriormente con una berlina de gran tamaño. El tercer modelo de la casa fue el Model X. Su nombre deriva del sueño del propietario, Elon Musk, de formar una gama SEXY, de ahí los nombres de los cuatro vehículos principales que forman la familia Tesla, a excepción del Model 3, que tuvo que adaptar su apellido al estar la denominación ya reservada por parte de Ford. El Model X no sólo es el tercer modelo de la familia, es el más grande de todos.
Tras la expectación generada con las dos primeras unidades, el Tesla Model X se presenta oficialmente en el Salón de Los Ángeles de 2012, llamando inmediatamente la atención por el formato tan particular de sus puertas traseras. Su comercialización en nuestro mercado ha sufrido intermitencias, aunque desde su última reintroducción a principios de 2023 luce nuevas características y un diseño renovado. Es el rival a batir dentro del segmento de los SUV más grandes del mercado, considerado por muchos como un modelo premium.
Radar de proximidad
Detector del ángulo muerto
Control de crucero inteligente
Mantenimiento de carril
Cámaras de aparcamiento 360º
Cuadro de instrumentos digital (10 pulgadas)
Sistema multimedia (17 pulgadas)
Sist. multimedia trasero (8 pulgadas)
Los Model S y Model X representan la gama más alta de la casa, junto con el Cybertruck que juega en su propia categoría. Su precio ha crecido a lo largo de los últimos años, alejándose de las categorías generalistas, lo que lo ha situado cada vez más abajo en la lista de los modelos más vendidos. Como es costumbre en la marca americana, se ofrece todo el equipamiento de serie a excepción de unos pocos detalles de la lista de opcionales como 6 tonalidades para la carrocería, dos juegos de llantas, bola de remolque, diferente número de asientos o el famoso paquete de asistentes a la conducción con Capacidad de conducción autónoma total (7.500 euros).
A pesar de contar con mucha tecnología de serie el Model X es un coche caro de comprar. En España la tarifa mínima arranca en los 99.990 euros, sin ofertas o promociones, ni con ayudas estatales. Esa cantidad se asocia con la versión de acceso mecánica con dos motores y la mayor autonomía posible. En la vertiente superior, situándose como el modelo más caro de todos encontramos al Model S Plaid. Su configuración única le obliga a elevar la factura final de compra hasta un mínimo de 114.990 euros, sin ofertas, descuentos o planes subvencionados.
Como ya hemos dicho, Tesla estructura su gama en función de las versiones mecánicas y no de los acabados. Dos son los modelos disponibles en la familia del Model X. Se reservan las configuraciones más avanzadas con las máximas prestaciones y las baterías más grandes. Los dos modelos cuentan con la misma batería de iones de litio situada entre los ejes con una capacidad neta de 100 kWh. Su estructura eléctrica de 400 voltios permite potencias de carga de hasta 250 kW en corriente alterna.
Los diseñadores de Tesla quisieron en todo momento llamar la atención. Si bien la forma del Model X apenas ha variado desde su presentación hace ya más de 12 años, el modelo ha sufrido pequeñas mejoras estéticas, aunque conserva las puertas traseras de apertura eléctrica tipo Falcon. Un conjunto de cámaras controla el entorno y un software se encarga de medir el espacio disponible para que los ocupantes traseros puedan acceder al coche. Si bien no es un formato práctico en muchos escenarios sí resulta impresionante de ver. Con todo ello, el SUV más grande de Tesla destaca entre el tráfico, aunque principalmente lo hace por su tamaño.
En Europa está considerado como un modelo del segmento E. Entre sus rivales figuran nombres como el Mercedes EQS o el BMW iX, entre otros. De punta a punta el Tesla Model X alcanza los 5,057 metros de largo, 1,999 metros de ancho y 1,68 metros de alto para una distancia entre ejes de 2,965 metros. Otras cifras importantes a destacar son el peso, entre 2.410 y 2.539 según la configuración seleccionada y una altura libre con respecto al suelo de 16,6 centímetros. A pesar de la tracción total no es un coche especialmente habilidoso a la hora de salir fuera del asfalto.
La consideración de modelo premium no se corresponde únicamente con el precio, la potencia o el equipamiento. De puertas para dentro el Model X también luce un muy aspecto. La presentación es llamativa en cualquiera de sus versiones. Los materiales arrojan muy buena sensación de calidad percibida, pero falla en algunos remates y ajustes que con el tiempo han demostrado aguantar bien. Como es tradicional en la empresa el minimalismo llama la atención. Pocos botones físicos que centran toda la acción en las pantallas.
Si bien cuenta con un cuadro de instrumentos digital con la información más importante relativa a la conducción, la atención principal la recibe la gran pantalla central de 17 pulgadas. Los pasajeros traseros también tienen su propio sistema de infoentretenimiento con una pantalla instalada de 8 pulgadas que permite jugar a varios juegos así como ver contenidos multimedia de diferentes aplicaciones como YouTube. El Model X es el coche más familiar de Tesla gracias a una capacidad máxima de siete pasajeros repartidos en tres filas de asientos.
Hay varias configuraciones para escoger, 5, 6 o 7 plazas. De serie se ofrecen cinco plazas y dos filas de asientos. Un formato estándar que ofrece una generosa habitabilidad para los ocupantes traseros, aunque la butaca central es más incómoda por ser más dura y más estrecha. La disposición de seis plazas coloca tres filas de asientos en parejas. La tercera fila se pliega perfectamente en el suelo del maletero. Lo mismo pasa con la variante de siete plazas y tres filas. El acceso a la tercera fila es incómodo y estrecho para personas de movilidad reducida o personas mayores.
Si bien está considerado como un SUV, sus distintas configuraciones de asientos también pueden servir para bautizarlo como un monovolumen, aunque no presenta las habituales proporciones de esta categoría. Sin duda alguna es el vehículo más familiar de la casa Tesla y eso quiere decir que cuenta con un generoso espacio de carga. El baúl trasero ofrece un generoso espacio con formas bien aprovechadas, aunque su capacidad de carga se diluye casi al completo al desplegar los dos asientos posteriores. Un problema común en este tipo de vehículos.
A pesar de ello, el volumen del maletero del Tesla Model X en condiciones normales es sobresaliente. Tesla hace oficial un espacio de 2.410 litros, aunque esa medición no se realiza bajo los estándares europeos. Tesla considera todo el espacio de carga hasta los asientos delanteros. En la parte delantera, bajo el capó, encontramos un segundo espacio de carga con un mínimo de 183 litros. Un segundo maletero muy grande que no sólo permite guardar los cables de carga, también otros objetos de tamaño medio que liberan de espacio al maletero principal.
A pesar de contar ya con unos cuantos años en el mercado, el Tesla Model X sigue ofreciéndose a los conductores eléctricos como la mejor alternativa dentro del segmento E-SUV. Sin embargo, su precio ha crecido tanto que hoy sus ventas son prácticamente residuales. Destaca en numerosos apartados como equipamiento, espacio o rendimiento, pero sobre todo lo hace en materia de eficiencia. Su autonomía y sus consumos dan mucha tranquilidad a la hora de viajar. Las puertas traseras tipo Falcon si bien son muy llamativas resultan algo incómodas en ciertas ocasiones y como suele ser habitual en Tesla deben mejorarse o pulirse ciertos detalles de refinamiento y remates.
Ingeniero de carrera y periodista de motor por placer y pasión. Redactor de Híbridos y Eléctricos desde 2021, cubriendo la actualidad del sector de los vehículos eléctricos y la movilidad sostenible.
Temas
