El consumo de combustible de un coche es uno de los factores de compra más determinantes. Si queremos acercarnos o, incluso, reducir las cifras homologadas por los fabricantes es vital hacer una conducción eficiente. En nuestro caso, siguiendo una serie de sencillos pasos lo hemos conseguido.
En Híbridos y Eléctricos hemos participado en el Ecomotion Tour, una prueba de eficiencia organizada por Ayvens, empresa surgida de la fusión entre las compañías de renting ALD Automotive y Lease Plan, realizada con tráfico abierto. Al volante de un Renault 5 eléctrico hemos reducido el consumo oficial en un 12,07%. Así lo hemos hecho.
La 16 edición del Ecomotion Tour ha tenido un recorrido de unos 400 kilómetros, y se ha celebrado entre Madrid y Segovia. En ella han participado 23 marcas con un total de 31 vehículos diferentes, todos ellos electrificados, y divididos en tres categorías: híbridos, híbridos enchufables y eléctricos.
En la categoría de eléctricos, la más masificada con 18 participantes, el ganador fue el Citroën e-C3 Aircross, con un consumo de 12,92 kWh/100 km y una reducción del 29,39% con respeto a su WLTP de referencia. Híbridos y Eléctricos logró la tercera posición con el Renault 5, con una reducción del 12,07%.
Entre los híbridos enchufables, el vencedor ha sido el MG HS, con un consumo total de 7,54 kWh de energía eléctrica y 2,35 litros de carburante por cada 100 kilómetros. Mientras, en la categoría de híbridos, donde se englobaban tanto híbridos convencionales como híbridos ligeros, el vencedor fue el Volkswagen Tayron, con un consumo de 5,09 litros a los 100 y una reducción del 22,80% con respeto a su WLTP.
En la prueba, por cada coche hay un piloto y un copiloto, con un roadbook, un libro de ruta con el itinerario a seguir, y poco más. No se utiliza el navegador y tampoco se sabe la ruta con anterioridad para que nadie pueda prepararse el terreno y ganar ventaja. Por delante solo queda la astucia tanto en el volante como en la navegación, ya que no hay tiempo para perderse.
En dicho roadbook vienen los kilómetros a recorrer en cada etapa, el tiempo máximo para completarlo y la velocidad media recomendada para llegar de un punto a otro sin problema. Porque si se tarda más del tiempo previsto conlleva penalizaciones que después desvirtúan el gasto de combustible, pero en nuestro caso no las hubo.
Como decíamos, para lograr buenas cifras de consumo hay que ser inteligente. Esto pasa por no ser bruscos al volante y conducir de forma suave, sin acelerones ni movimientos bruscos. Siempre es vital anticiparse a cualquier situación de la carretera, por ejemplo, si vamos a detenernos por aproximarnos a un semáforo o ante un paso de cebra.
Este punto es todavía más útil cuando hablamos de un coche eléctrico, ya que la frenada regenerativa es un gran aliado para bajar consumo. Aunque el Renault 5 no la tiene, es muy importante jugar con los diferentes niveles de intensidad, especialmente, si podemos hacerlo a través de las levas del volante, muy útil, para apenas pisar el pedal del freno. Y si la transmisión tiene la B (Brake), también es un punto a tener en cuenta.
Hay otra serie de consejos muy interesantes, como mantener una velocidad constante siempre que se pueda, jugar con la inercia del coche y conducir a vela el máximo tiempo posible, ya que optimizará el consumo. A modo de ejemplo, si en una parte del trayecto no hace falta acelerar para mantener el ritmo, no tiene sentido acelerar para poco después tener que frenar.
Si el coche tiene modos de conducción es interesante seleccionar la opción Eco, ya que generalmente limita la potencia del motor, y la aceleración del coche se vuelve menos reactiva y más lineal.
Hasta aquí hemos repasado algunas técnicas de conducción, pero otro punto que incide directamente en el consumo del coche es la climatización, especialmente en meses de calor. El mejor consejo es hacer un uso racional, pero siempre con cabeza, ya que siempre hay que llevar una temperatura adecuada dentro del coche. En caso contrario, nos enfrentamos a un problema de seguridad vial, pues puede desencadenar en mareos o pérdidas de concentración.
Siempre es mejor usar la climatización que bajar las ventanillas, ya que esta última acción ejerce más resistencia aerodinámica en el coche y conllevará un aumento de combustible. Eso sí, en caso de necesidad, se aconseja bajar las ventanillas cuando se circula a poca velocidad, por ejemplo, al atravesar un pueblo con velocidad máximas permitidas de 30 o 50 km/h, ya que se renovará el aire interior.
Otro factor que varía el consumo es el peso del coche, ya que cuantos más kilogramos, más gasto. Por ello, es importante llevar lo primordial y necesario, y evitar transportar cargas innecesarias. Por último, es importante que el coche y todos sus componentes estén en buen estado.
Con todos estos consejos, en nuestra participación del Ecomotion Tour 2025 logramos reducir un 12,07% el consumo oficial de un Renault 5 después de recorrer cerca de 400 kilómetros. O dicho de otro modo, si homologa un gasto de 15,1 kWh/100 km, el resultado final fue de 13,28 kWh/100 km. Una cifra que, seguro, se puede mejorar.
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He reducido un 12% el consumo oficial de un Renault 5, y lo he logrado con estos sencillos pasos
