Cocinar en horno de piedra aporta un sabor más especial a la comida, y además tiene un aura diferente a la hora de prepararlo. Hay métodos más rápidos para cocinar, también más económicos, pero el horno de piedra tiene algo distinto. Normalmente son de gas o de leña, pero hay un fabricante de coches que se ha propuesto hacer el primer horno de piedra del mundo alimentado por hidrógeno y asegura que tiene una ventaja muy interesante para los sentidos.
En Toyota son muy buenos haciendo coches, pero de vez en cuando experimentan con cosas diferentes. Un pequeño grupo de empleados de la marca japonesa ha hecho sus primeros pinitos como pizzeros después de construir el primer horno de piedra que se alimenta con hidrógeno. Ni leña ni gas propano, este horno necesita algo más sencillo (el hidrógeno es el elemento químico más simple) y a la vez más complejo.
Se trata de un proyecto conjunto con el fabricante de electrodomésticos de gas Rinnai y el objetivo es avanzar hacia una «sociedad del hidrógeno». Según sus creadores, el primer paso crucial para conseguirlo es «hacer que el hidrógeno se sienta parte de la vida cotidiana» de la gente.
Según Toyota, el hidrógeno tiene un gran potencial en la cocina y hace que los alimentos estén más ricos. Como el hidrógeno tiene una alta temperatura de combustión, a medida que se quema, se combina con el oxígeno para producir vapor, lo que hace que los platos queden crujientes por fuera y jugosos por dentro. En una barbacoa de leña o carbón, alimentos como champiñones o verduras se pueden quedar secos fácilmente. Al parecer, esto no ocurre cocinando con hidrógeno.
Dice Toyota que también pueden «medir cuantitativamente los efectos sobre los ingredientes» para descubrir cómo funcionan los mecanismos físico-químicos que afectan al sabor. Para la firma japonesa, involucrar a sus ingenieros en estas lides «puede abrir enormes posibilidades» para la tecnología alimentaria.
Pese a las interesantes ventajas organolépticas, no todo podía ser bueno. La primera cocina del mundo alimentada por hidrógeno también plantea muchos desafíos, empezando por la seguridad. Y no porque no sea segura, sino porque no existen normas de seguridad estandarizadas ni sistemas de certificación para este tipo de tecnología.
Evidentemente, era fundamental crear una cocina de hidrógeno segura, para lo cual se puso en común la experiencia de Rinnai en aparatos de gas y tecnologías de combustión con la experiencia de Toyota en la fabricación de pilas de combustible y propulsores de hidrógeno, que se ha perfeccionado en la última década con el Toyota Mirai, entre otras aplicaciones. Incluso se han utilizado métodos empleados en los hornos de secado de pintura del proceso de fabricación de automóviles.
«Discutimos la creación de pautas de seguridad y otros elementos esenciales con Toyota, identificando y resolviendo problemas mientras presentamos nuestro trabajo en varios eventos», explica Masao Nonoyama, ingeniero del departamento de I+D de Rinnai.
Este horno de piedra de hidrógeno se presentó en el Japan Mobility Show del año pasado, sirviendo pizzas y croissants recién horneados a los visitantes. Sus creadores comentan con cierta ironía que fue «la primera vez que los niños mostraban interés en el hidrógeno».
El horno de piedra no es la única cocina de hidrógeno que se está desarrollando. Toyota también ha creado una parrilla de hidrógeno, que se ha utilizado en el Rally Challenge y otros eventos de motorsport para cocinar aperitivos para empleados y asistentes.
Redactor y probador de Híbridos y Eléctricos, desde 2019 cubriendo la actualidad del sector de los vehículos eléctricos y la movilidad sostenible.
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