**Posible bancarrota amenaza a marcas automovilísticas en 2024**
Durante este año, varias marcas de automóviles enfrentan graves dificultades financieras, destacándose el caso de Fisker, una firma que había generado grandes expectativas pero que ahora se encuentra en una situación crítica para algunos de sus propietarios. Otra compañía en peligro es Canoo, especializada en furgonetas eléctricas y con el respaldo de la NASA.
Canoo, que una vez destacó por su innovación estética, ha mostrado signos de debilidad financiera en los últimos meses, lo que ha llevado a una «pausa obligatoria no remunerada» para sus empleados desde diciembre de 2024. Esta medida se extenderá hasta 2025 y se teme que pueda resultar en la bancarrota de la empresa.
Reportes indican que Canoo ha enfrentado problemas financieros desde el 2023, agravados por gastos excesivos de su directivo. Además, la compañía mintió sobre la producción de vehículos en Oklahoma, revelando serias deficiencias en su operación y gestión financiera.
A pesar de contar con todo el equipamiento necesario, Canoo no logró cumplir con sus promesas de producción, generando desconfianza en torno a su situación actual. El CEO de la empresa, Tony Aquila, también es propietario de una empresa que fabricó los vehículos a mano en Texas, lo que añade más interrogantes sobre la veracidad de su operación.
La incertidumbre rodea el futuro de Canoo, con indicios que lo colocan en una senda negativa para los próximos meses.
